Narras Tú:
Cuando mis pulmones rogaban por aire me separé lentamente de Nick y lo miré a los ojos…
Tú: ¿Qué significa esto?
Nick: Significa que te quiero mucho y que estoy dispuesto a que comencemos todo de nuevo…
Tú: Me parece muy bien (dije sonriendo y lo besé otra vez).
Definitivamente Nick hacia que me olvidara de todo… de mis problemas, de donde estaba, y hasta en que estado estaba. No recordé que estaba completamente empapada en medio de un lago hasta que una fría brisa hizo que tiritara…
Nick: Lo lamento… mejor vamos, puedes enfermarte.
Tú: Ok.
Me tomó de la mano y caminamos hasta su casa. Ninguno de los dos podía disimular la inmensa alegría que sentíamos, no sé como había soportado tanto tiempo sin estar con él. Entramos y nos encontramos con Kevin y Frankie que aparentemente estaban jugando a las luchas. El mayor me miró extrañado y sorprendido, mientras el menor dibujo una enorme sonrisa en su rostro y corrió a nuestro encuentro…
Frankie: ¡______! (estaba a punto de abrazarme, pero se detuvo al notar que estaba empapada). ¿Por qué están mojados?
Nick: Una larga historia… pero tengo una que es más corta e importante…
Kevin: ¿Y se podría saber cuál es?
Tú: Con Nick nos arreglamos (dije mostrando nuestras manos entrelazadas).
Frankie: ¡Wiii! ¡Ahora ______ va a venir todos los días a jugar conmigo!
Nick: Sueña enano, ella vendrá a verme a mí (me acercó a él y me besó).
Frankie: ¡Que asco! (tapó sus ojos con sus manitos). Por favor no hagan eso frente a mí.
Kevin: ¡Jajajajaja! Pues que bien que solucionaron todo, los felicito.
Tú: Muchas gracias.
Nick: Creo que es mejor que nos cambiemos de ropa antes que cojamos un resfriado.
Subimos y Nick me dijo que esperara en la habitación que había sido mía cuando vivía con ellos mientras él buscaba ropa para mí y unas toallas. Miré la habitación y a mi mente llegaron muchos recuerdos… cuando me encontré con Nick, los momentos en que de a poco recuperaba mi memoria… no podía creer que ya hubiera pasado tanto tiempo desde lo de Andrés, ya iban casi tres meses y el verano estaba por terminar… el verano más importante de mi vida hasta ahora. Fijé mi vista hacia la ventana y vi el relejo de Nick en ella. Volteé y estaba apoyado en el umbral de la puerta con los brazos cruzados y una media sonrisa…
Tú: ¿Hace cuánto estas aquí? (me acerqué a él).
Nick: No hace mucho… ¿en qué pensabas? (acarició mi mejilla).
Tú: En todo lo que ha pasado este verano… ha sido intenso…
Nick: Cierto… pero ha sido genial…
Tú: ¿Por qué tanto?
Nick: Porque te conocí a ti (me dio un pequeño beso). Toma, mi mamá me prestó esta ropa para ti y traje estas toallas. Si quieres te puedes bañar, para que se te pase un poco el frío.
Tú: Gracias…
Tomé las cosas que había traído, deposité un beso en su mejilla y me dirigí al baño. Dejé que el agua recorriera mi cuerpo y me relajé por completo. Terminé de bañarme, me vestí así http://media.photobucket.com/image/ashley%20tisdale/XnessaashleyX/003-1.jpg?o=246 con la ropa de Denisse y bajé a la sala. No había nadie y sentí unos ruidos en la cocina, por lo que me encaminé hacia ella. Ahí estaba Nick poniendo la mesa, seguramente para que cenáramos. Me acerqué a él y lo abracé por la espalda…
Nick: Creí que te habías ahogado en la ducha (volteó para estar frente a mí).
Tú: ¿Tanto me demoré? (pregunté sonrojada).
Nick: Más o menos, pero no importa (me besó). ¿Tienes hambre? La cena esta lista…
Tú: ¿Vamos a comer solos? (viendo que sólo habían dos platos en la mesa).
Nick: Sí, no sé que les habrá pasado a los otros que tuvieron cosas que hacer y nos dejaron solos (respondió con mirada inocente).
Tú: Que oportunos (sonreí). ¿Y en que consiste en menú del hoy monsieur Jonas?
Nick: Bueno, tenemos spaghetti y el postre es… es… una sorpresa que te la daré en privado (susurró en mi oído).
Sentí como mis mejillas se sonrojaban y vi como Nick reía ante mi reacción. Comimos tranquilamente y llegó la hora del postre. Me puse muy nerviosa porque dijo que lo esperaba en el living. La verdad era que tenía en mente en que podía consistir el postre y eso precisamente era lo que me podía en ese estado. Nick asomó su cabeza por la puerta…
Nick: Cierra los ojos…
Obedecía a lo que me pedía y mi respiración comenzó a hacerse más agitada. Escuché que Nick entraba en la habitación y Lugo dijo…
Nick: Ahora los puedes abrir…
Lentamente abrí los ojos y me sorprendió bastante lo que vi…
Tú: ¿Ése es el postre? (pregunté confundida).
Nick: Sí, ¿acaso no te gusta? ¿Qué era lo que esperabas?
Tú: No, nada. Esta… esta bien, me encanta el tiramisú.
Nick: Lo sabía, por eso quería que fuera una sorpresa (sonrió).
No podía creer lo que había imaginado como postre. ¡Qué mente más sucia ______! Por suerte Nick no se había dado cuenta, porque habría creído que era una depravada o algo por el estilo. Terminamos el postre y nos tumbamos en el sofá a ver una película. Él me abrazó y yo apoye mi cabeza en su pecho. Perdí la noción del tiempo y ni siquiera le puse atención a lo que estaban dando por el televisor. Cerré mis ojos y disfruté de las suaves caricias de Nick. Aspiré el varonil aroma de su perfume y puse mi mente en blanco. En ese momento nada me importaba más que estar con Nick y disfrutar de su compañía.
No recuerdo bien cuanto tiempo pasó, pero el sonido de la puerta de entrada me sacó del trance en el que estaba.
Tú: ¿Quién será? (pregunté separándome un poco de él).
Nick: Supongo que Joe (dijo rascando su cabeza).
Tú: Joe… ¡oh no! ¡¿Cómo lo pude olvidar?!
Me levanté rápidamente del sillón y corrí hacia la entrada de la casa.
Tú: ¡Joe! ¿Cómo esta Fran? ¿Pudiste averiguar qué le paso?
Joe: Sí, bueno… ¿lo podemos hablar en la cocina? Necesito un café…
Nos dirigimos hacia la cocina y Nick nos siguió con cara de interrogación, obviamente no sabia qué le estaba pasando a mi amiga.
Tú: Y bueno, ¿qué le pasó?
Joe: Es una larga historia…
Narra Joe:
Logré hacer que Fran se calmara y entre sozollos me dijo que sus padres la habían dicho que faltaba poco para que volviera a San Francisco. Le dije que no se preocupara, que no la dejaría y que no me importaban los kilómetros de distancia, no iba a dejar que nada nos separara. Ella, testaruda como siempre decía que no quería obligarme a que tuviéramos una relación a distancia y que termináramos sufriendo. Yo sabía que lo decía para protegerme, no porque no me quisiera. Finalmente quedamos en que disfrutáramos las últimas semanas que teníamos juntos y luego veríamos que era lo que nos depararía el futuro. No estaba dispuesto a terminar con ella y sólo accedí al trato para que ella quedara más tranquila.
Con dolor al recordar el sufrimiento de mi novia le conté a ______ y a mi hermano todo lo que había pasado esa tarde…
Joe: Después de tanto llorar se quedo dormida, fui a hablar con Andre y me vine…
Tú: ¡No puedo creer que me haya olvidado de mi amiga! Me siento mal…
Joe: No te preocupes, tú trataste de ayudarla y ella no te dejó. Además, creo que tenias cosas más importantes que hacer… ¡o me equivoco? (dije mirándolos significativamente).
Nick: Eh… bueno… nosotros…
Tú: Nosotros estamos juntos otra vez (respondí con una tímida sonrisa).
Joe: Pues los felicito, ya era hora que se dejaran de niñerías y se dieran cuenta que no pueden estar separados.
Tú: Sí, es verdad (miro con dulzura a Nick). Creo que es mejor que me vaya, ya es tarde y deben estar preocupados por mí.
Joe: Te llevo si quieres.
Tú: Gracias.
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