Capítulo 100 (Segunda Temporada)

martes, 26 de febrero de 2013

¡CHICAS, POR SIN LLEGÓ EL ESPERADO FINAL! He estado un poco ocupada con mis amigos y familia por las vacaciones, pero espero que la espera (valga la redundancia) valga la pena. Capítulo extra largo porque se lo merecen, de verdad. No puedo expresar con palabras lo mucho que las amo y lo bien que me han hecho. Gracias a ustedes estoy cumpliendo uno de mis grandes sueños que es escribir y espero hacerlo por mucho tiempo más, si ustedes me lo permiten.
Es por eso que les tengo noticias. Hollywoodbros lo empecé con Nicole, y aunque le tengo mucho cariño a este blog y al antiguo fotolog, quiero algo que sea solamente mío y también quiero crecer como escritora aficionada. Tengo muchos proyectos en mente, algunos ya están en proceso. Van a ser novelas un poco más maduras, mejores escritas, etc, por lo que hice una nueva página que es http://www.wattpad.com/user/ownthesunshine, donde desde ahora voy a publicar mis novelas. También hice un twitter para que estemos en contacto más directo, que es https://twitter.com/ownthesunshine. Síganme, yo las sigo de vuelta y vamos a poder conversar. Por último, tengo una página de facebook, para las que no usan twitter. La página es https://www.facebook.com/ownthesunshine, para que le pongan "me gusta" y comenten. Por esas dos redes sociales me voy a estar moviendo y les voy a avisar cuándo suba a wattpad. Para las que usaban el antiguo facebook, vayan a estas nuevas páginas por favor.
Espero que estemos en contacto y que me acompañen en este nuevo proyecto, del que estoy ansiosa y orgullosa.
Con esto dicho, les dejo el último capítulo de la novela 'Our Love Is Like A Song'. MUCHAS, MUCHAS, MUCHAS gracias a todas las que estuvieron conmigo por estos cinco años (wow, mucho tiempo). También a las que se subieron al barco en el camino. Gracias, eso es lo único que me queda decir.

Las amo.

Fran.~

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7 años después…

Narras Tú:

Me miré en el espejo de cuerpo entero una última vez, sonriendo. Ya iba más de dos semanas desde que no dejaba de sonreír y dudaba que mi expresión cambiara pronto. Estaba demasiado feliz como para hacerlo.
Escuché unos pequeños golpes en la puerta del dormitorio y volteé para poder ver como Nick entraba en la habitación.
Nick: ¿Cariño, estás lista? Los chicos tienen que estar por llegar… pero si quieres nos podemos tardar un poco más en recibirlos (agregó cuando me vio, acercándose hasta tomarme por la cintura).
Tú: Mmm… no creo que sea apropiado (reí al sentir como depositaba suaves besos en mi cuello).
Nick: Créeme, nada de lo que estoy pensando en este momento es apropiado (susurró en mi oído, produciéndome escalofríos). Te ves hermosa (pasó sus manos por la piel de mi espalda que el vestido dejaba al descubierto).
Tú: Nick (mi piel se erizó y sentí como mis rodillas flaqueaban), ahora no (pedí en un susurró).
Nick: ¿No qué? (preguntó con voz profunda, con su boca a milímetros de la mía).
Tú: Esto (murmuré armándome de valor para separarme. Puse mis manos en su pecho y lo alejé). Nosotros fuimos los que invitamos a los chicos, no podemos hacerlos esperar, por más que queramos.
Nick: Sabes que esta noche no te podrás librar de mí (dijo cuando el timbre sonó, anunciando la llegada de los comensales).
Tú: Tampoco pensaba hacerlo (sonreí coqueta y besé fugazmente sus labios).
Mi corazón comenzó a palpitar de emoción por ver a mis amigos después de tanto tiempo, y en una ocasión tan especial. Abrí la puerta de entrada y vi a una de mis mejores amigas parada en la entrada.
Fran: ¡______! (exclamó al verme). ¡Estás hermosa! (me abrazó con fuerza).
Tú: ¡Tú estás resplandeciente! (la saludé con el mismo entusiasmo mientras la guiaba al interior de la casa). Nunca había visto a una embarazada más bella (sonreí acariciando su creciente pancita de seis meses).
Fran: Estoy enorme (hizo una mueca), pero este pequeño milagro vale la pena.
Joe: Hasta embarazada te ves increíble (repuso su marido apareciendo en la escena y abrazándola por atrás).
Fran: Eso lo dices porque te mataría si no pensaras así (dijo tranquilamente). Ahora dejemos de hablar de mí y muéstramelo, que me muero de curiosidad.
Sabía que Fran no estaba hablando de la casa que con Nick habíamos comprado y estábamos inaugurando esa noche. Ese era un detalle frente al anillo que desde hace un par de días decoraba mi dedo anular.
Tú: No es para tanto (sonriendo, le mostré mi mano izquierda. Estaba realmente dichosa, pero no quería sonar creída).
Fran: ¡¿Cómo que no?! ¡Amiga, estás comprometida! (chilló emocionada al ver el diamante).
Andre: Y ahora todo el vecindario lo sabe, Fran (dijo mordaz y sonriente a la vez).
Andre y Kevin entraron a nuestro nuevo hogar acompañados de Nick, quien supuse les había abierto la puerta, pues yo no la había escuchado.
Tú: No puedo creer que estemos todos juntos otra vez (corrí a abrazar a mi amiga y a mi cuñado).
Kevin: Y nosotros no podemos creer que finalmente nuestro hermanito se puso los pantalones y te hizo la gran pregunta (se acercó a Joe y Fran y los saludó).
Joe: Creímos que Frankie se casaría primero que Nicholas (dijo en tono de broma).
Nick: Y pensar que los extrañé. Debo estar loco (abrazó a sus hermanos de la misma forma que hacía desde que los conocía).
Después de los saludos pasamos a la terraza a cenar. Una de las cosas que me encantaba de Los Ángeles era el buen clima que se disfrutaba casi todos los días del año, por lo que al elegir una casa con Nick, quisimos una con un gran jardín trasero para poder disfrutar de comidas al aire libre y amplios espacios para relajarnos.
Ver como toda mi familia estaba nuevamente reunida, porque las cinco personas con las que estaba sentada en aquella mesa eran mi familia, hizo que recordara cómo habíamos empezado y cómo estábamos ahora. Junto a mis amigas pasamos de ser unas simples chicas de California a cantantes reconocidas en todo el mundo, gracias a la ayuda de los Jonas Brothers.
Antes de conocer a Nick era una pobre adolescente huérfana que tenía que soportar los abusos de su malvada tía y sólo encontraba consuelo en el recuerdo de sus amigos y sus padres. Pero en cuanto Nick entró en mi vida, después de un frustrado secuestro y habiendo perdido la memoria, todo mejoró. Fui feliz después de mucho tiempo y conocí al amor de mi vida. Nuestra relación no fue fácil, tuvimos que pasar por muchas cosas para encontrar la paz necesaria para estar junto, mas lo logramos. Luego de dos años de noviazgos, peleas, mentiras, amor, llanto, canciones y crecimiento, entendimos que no podíamos vivir el uno sin el otro, y no nos habíamos separado desde entonces.
La vida de mis amigas y los hermanos de Nick había sido bastante parecida. Andre y Kevin se conocieron y en seguida supieron que eran el uno para el otro. Su relación siempre fue la más tranquila de todas, lo que representaba bien sus personalidad y profundo amor. Tanto era lo que se querían que en cuanto nos graduamos de secundaria, Kevin le propuso matrimonio y ella aceptó. Andre tenía sólo 18 y él 24, por lo que decidieron esperar a que mi amiga terminara la universidad, y cinco años después de eso se casaron y mudaron a Tennessee. Ya habían pasado dos años y tenían una hermosa finca en Nashville donde vivían con su hijo de casi un año, Paul Kevin Jonas III. Crearon una empresa discográfica y eran reconocidos en el mundo de la música como importantes ejecutivos y productores dentro de la industria.
Fran y Joe se enamoraron perdidamente, pero no se les hizo fácil. Fran vivía en San Francisco mientras Joe, al igual que el resto de nosotros, en Los Ángeles. La distancia hizo que tuvieran algunos problemas de confianza y estuvieron separados un tiempo, sin embargo el amor fue más fuerte y cuando Fran entró a estudiar música y actuación a Juilliard, Joe se fue a Nueva York a vivir con ella. Eso fue siete años atrás, y desde entonces no se movieron de la gran manzana. Joe profundizó su veta de actor, protagonizando varias películas y series de televisión. Por su parte, Fran se dedicó a participar de musicales en Broadway al terminar sus estudios. Poco a poco fue consiguiendo mejores puestos en las producciones y alcanzó fama cuando fue elegida para protagonizar el musical “My Fair Lady”, obra en la que estuvo por varios meses, hasta que supo que estaba embarazada. Ambos estaban muy emocionados, pues habían pasado meses varios meses desde su matrimonio y lo único que querían era ser padres.
Nick y yo, por otro lado, nos quedamos viviendo en Los Ángeles. Un año después de terminar el colegio me decidí a estudiar música en UCLA, al igual que Andre. A la larga, yo fui a única de mis amigas que siguió con la carrera de cantante. Tenía tres álbumes publicados, había hecho giras por todo el mundo y mi trabajo había sido reconocido varias veces. Nick también seguía en la industria de la música, trabajando como productor musical para una importante discográfica. Y hacía dos semanas, nos habíamos comprometido en la cena más romántica que había tenido en toda mi vida.
Con Nick hacía tiempo que queríamos comprar una casa, pero él sabía que yo habría preferido hacerlo estando ya comprometidos. Ya habíamos comprado la casa y estaba siendo amueblada cuando, en un picnic en la playa, a la luz de la luna, me pidió que fuera su esposa. Yo por supuesto no me hice de rogar, y ahora estábamos celebrando nuestro compromiso e inaugurando la casa junto a nuestros mejores amigos.
En cuanto a la banda, hacía un par de años, antes que Kevin y Andre se casaran, los chicos hicieron su último álbum y gira mundial como Jonas Brothers. Fue triste, pero a la vez necesario. Sentían que ya habían cumplido su misión como grupo y tenían otras metas que alcanzar.
Andre: Dentro de poco todo el grupo va a estar casado (dijo alegre secando la vajilla que hace poco habíamos terminado de usar, mientras Fran la lavaba y yo la guardaba. Los chicos, como siempre después de cada reunión, estaban jugando videojuegos).
Fran: Y pensar que fue ayer cuando conocimos a los chicos. El tiempo pasa demasiado rápido (acarició su estómago con ternura).
Andre: ¡Dímelo a mí! Mi pequeño Kev ya está caminando por sí solo (comentó orgullosa). Y Kevin le mostró a todos en la oficina un vídeo de Kev andando por la sala. Está loco (rió).
Tú: Loco de amor por su familia (le corregí). Todo esto es tan extraño, pero a la vez emocionante. Hasta ahora todo ha sido maravilloso en la casa, pero temo que cambie a medida que pase el tiempo (confesé).
Fran: Relájate. Yo estaba igual que tú cuando me mudé con Joe, y tenía 18 años. Obviamente no todo es un cuento de hadas, sin embargo después de un tiempo te acostumbras. Además, estar todos los días con tu mejor amigo, que él sea el último que vez al dormir y el primero al despertar es lo mejor.
Ver en los ojos de mis amigas el amor que profesaban por sus maridos hizo que mariposas revolotearan en mi estómago. Me tranquilizaba mucho saber que las chicas habían pasado por lo mismo, mas todo había resultado bien.
Nos quedamos hasta bastante tarde con Fran y Andre viendo algunas cosas para el matrimonio. Con Nick no teníamos fijada la fecha, pero según mis amigas nunca era demasiado temprano para comenzar con los preparativos. Eran tantas las cosas que se tenían que hacer que por un minuto mi cabeza comenzó a dar vueltas, pero en ningún minuto dejé de sonreír. Era simplemente un sueño hecho realidad.
Kevin: Amor, creo que es hora de irnos (entró al comedor y abrazó a su mujer por los hombros).
Andre: Tienes razón (miró su reloj). ¿Le dijiste a Denise que pasaríamos a buscar a Kev mañana en la mañana?
Kevin: Sí, y le prometí que almorzaríamos ahí también. ¿Ustedes irán? (nos preguntó a Fran y a mí).
Fran: No creo. Joe tiene una reunión de trabajo y yo le prometí a Joaquín que comeríamos juntos. Aunque podría pasar en la tarde. Hace tiempo que prometí mostrarle las ecografías.
Tú: Nick comentó algo, pero tampoco podemos. Todavía quedan cosas de la mudanza y nos queremos atrasar más.
Andre: Bueno, nos veremos pronto, entonces. Nos vamos a quedar una semana aquí.
Tú: Excelente (abracé a mi amiga y cuñado). Muchas gracias por venir.
Kevin: Felicitaciones otra vez. Y ten paciencia con mi hermano.
Tú: Lo haré (reí).
Poco después Fran y Joe también se fueron. Estaba cansada, por lo que Nick los fue a despedir a la puerta. Yo aproveché de subir a nuestra habitación, quitarme los zapatos e ir al balcón a disfrutar de la cálida noche. Apoyé los antebrazos en la baranda y cerré los ojos, dejando que el leve viento moviera mi cabello.
Nick: ¿En qué piensas? (susurró en mi oído, produciendo un escalofrío. Abrazó mi cintura y pegó su cuerpo a mi espalda, descansando su barbilla en mi hombro).
Tú: En lo feliz que estoy (sonreí, disfrutando de la maravillosa vista que daba desde el balcón, inclusive en la noche). Y en lo mucho que te amo (volteé con suavidad y lo besé tiernamente). Me gustó tener a los chicos en casa. Los extrañaba mucho.
Nick: Sí, fue divertido. Habían pasado meses desde que nos reuníamos todos.
Tú: ¿Sabes? (intenté ignorar los besos que Nick desparramaba por mi cuello). No pude evitar recordar cuando recién nos conocimos, y todo por lo que tuvimos que pasar para llegar aquí. Fue duro, pero ha valido la pena (sonreír).
Nick: Tienes razón (me miró con fijeza). Nuestro amor es como una canción.
Tú: ¿Cómo una canción? (encarné una ceja).
Nick: Sí (sonrió). Tú sabes el proceso para componer una canción. Requiere tiempo, dedicación, que todo sea armónico, que la letra y melodía tengan sentido y concuerden entre sí. Pero lo más importante es que alguien la cante contigo. Puedes tener todo lo demás, sin embargo, si no tienes a una persona que la cante junto a ti, todo el trabajo será una pérdida.
Tú: Muy romántico, señor Jonas (lo miré con picardía). Nuestro amor es como una canción…
Nick: Porque tú cantaste junto a mí (sonrió sobre mis labios antes de besarlos).


FIN


Capítulo 99 (Segunda Temporada)

lunes, 21 de enero de 2013

¡PENÚLTIMO CAPÍTULO! Ojalá les guste porque me esforcé en hacerlo. La canción que sale es Everytime, original de Britney Spears, pero me inspiré en la versión de Glee. Es una canción hermosa y desde que la escuché supe que sería la indicada para esta parte.
Las adoro.

Fran.~

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Narra Nick:

Creo que estuve cerca de diez minutos fuera del departamento, armándome de valor para tocar la puerta. Sabía que era mi última oportunidad, el momento de la verdad, y sólo quería una respuesta.
Sensaciones que pensé nunca volvería a sentir me traspasaron como un rayo. Ver a ______ fue como contemplar la luz al final del túnel. Ya no había dudas, necesitaba estar a su lado. Ella era mi alma gemela.
Nick: Tenemos que hablar (dije al verla al otro lado de la puerta).
Lo único que quería era estrecharla en mis brazos y besarla, pero tenía que ir con cuidado. Por más brillantes que estuvieran sus ojos en ese momento, necesitaba asegurarme que ella sentía lo mismo.
Pude ver como su cuerpo reaccionaba ante mi presencia, haciéndola sentir indefensa. Sus rodillas temblaron por un segundo y temí que cayera. Sin embargo, después de la conmoción y sorpresa inicial, ______ se irguió y me miró con fingida calma.
Tú: Nick, yo…
Nick: No (la detuve poniendo mi índice sobre sus labios, lo que me dio escalofríos. La extrañaba tanto). Esta noche no podré ser un caballero porque realmente necesito hablar primero. Por favor (rogué).
Tú: Adelante.
Se hizo a un lado y me guió hasta la sala. No me di el tiempo de mirar el nuevo departamento de mi hermano y Fran. Después tendría bastante tiempo.
Tú: ¿Quieres un café? Te ofrecería algo para comer, pero estaba esperando mi cena y tu llegaste y…
No paraba de dar vueltas por la habitación mientras hablaba. Sus dedos no dejaban de moverse, lo que delataba aún más su nerviosismo. Yo había tenido tiempo para prepararme psicológico para este encuentro, ella no.
Nick: ______, cálmate (sujeté con delicadeza sus brazos para detenerla y la conduje hasta el sillón para que se sentara a mi lado). No volé seis horas para tomarme un café o cenar. Quizás después, pero ahora necesito que me escuches.
Tú: Está bien (suspiró). Es sólo que… no esperaba verte aquí.
Nick: Lo sé. Lo siento. Sé que debía esperar a que tú me llamaras, tenía que darte espacio, pero no podía esperar más (sin poder evitarlo, acaricié su mano. Necesitaba sentirla cerca. ______ no se alejó, por lo que continué sin dejar de mirarla a los ojos). Me equivoqué, fui un completo idiota, te traicioné, te hice mucho daño y no sabes lo arrepentido que estoy. Te lo dije esa noche y lo vuelvo a repetir, nunca fue mi intención herirte. Lo hice, y por eso te pido perdón. No podré perdonarme a mí mismo si tú no me perdonas primero, y de verdad necesito que lo hagas (pedí). Este mes sin ti ha sido una tortura. Despertar cada mañana sabiendo que me odiabas y que te quedabas dormida derramando lágrimas por mi culpa hizo que llegara a odiarme. Me aborrecía saber que le había hecho tanto daño a la persona que más amaba en el mundo (los ojos de ______ se llenaron de lágrimas). Ni siquiera saber que Andrés pasará sus días de prisión lejos de ti me calmó. No podía dormir, comer, lo único que me hacía seguir era el trabajo y la esperanza de volver a verte cuando llegaras a casa. Luché contra mis ganas de llamarte cada día desde esa noche en el hotel. Intenté distraerme, mas fue en vano. Tu imagen no dejaba mi mente ni por un segundo. Y es por eso que hoy estoy aquí. Rompí la promesa que hice conmigo mismo de esperar a que tú dieras el primer paso. Quiero estar contigo, necesito estar contigo, y si necesito viajar desde Los Ángeles a Nueva York sin previo aviso, lo haré un millón de veces. Daría todo porque me dieras una nueva oportunidad, si es que así lo quieres.
Había abierto mi corazón ante ______ completamente sin filtro. Ahí estaba yo, desnudo de alma frente a la mujer que me amaba, rogándole lo intentáramos una vez más.
Esperé su respuesta por lo que me parecieron eternos minutos de completo e incómodo silencio.
Tú: Yo… (rompió el contacto visual parándose del sillón). No sé muy bien cómo decir lo que siento ahora, o lo que he sentido durante este tiempo. Se me hace más fácil expresarme a través de canciones.
Me dedicó un atisbo de sonrisa para dirigirse al imponente piano de cola negro que se ubicaba al lado del ventanal con vista a la ciudad. Se sentó en el pequeño banco y acarició las teclas con armonía. Se veía más hermosa que nunca. Su melodiosa voz invadió el lugar y no pude hacer más que pararme a su lado a observarla y escuchar lo que me tenía que decir a través de aquella canción.

Tú: «Notice me,
Take my hand,
Why are we,
Strangers when,
Our love is strong
Why carry on,
Without me?

Everytime I try to fly,
I fall, without my wings,
I feel so small
I guess I need you baby,
And everytime
I see you in my dreams,
I see your face
It's haunting me
I guess I need you baby

I make believe,
That you are here,
It's the only way,
I see clear,
What have I done?
You seem to move on easy

And everytime I try to fly,
I fall, without my wings,
I feel so small
I guess I need you baby,
And everytime
I see you in my dreams,
I see your face
You're haunting me
I guess I need you baby

I may have made it rain,
Please forgive me,
My weakness caused you pain,
And this song's my sorry

At night I pray,
That soon your face will fade away

And everytime I try to fly,
I fall, without my wings,
I feel so small
I guess I need you baby,
And everytime
I see you in my dreams,
I see your face
It's haunting me
I guess I need you baby».

Volvió a reinar el silencio en el departamento. Miré incrédulo a ______ y ella me devolvió el gesto con una radiante sonrisa, riendo emocionada y con los ojos llenos de lágrimas.
Nick: Te amo (la abracé con fuerza, levantándola del banquillo). ¿De verdad? (pregunté todavía sorprendido. Que ella todavía quisiera estar conmigo era demasiado bueno para ser verdad).
Tú: Fui una tonta (se escondió en mi pecho mientras la seguía sosteniendo entre mis brazos). Nunca debí haber terminado contigo. Mi orgullo ganó y nos hizo a los dos miserables. Pensé que estaba enojada contigo, que por eso no podía perdonarte, pero era yo. Tenía rabia conmigo misma por no haberte entendido, por el sufrimiento que nos había provocado, y tardé mucho en darme cuenta de eso. Lo siento tanto (hipó).
Nick: No. Escucha (levanté su rostro y la miré con dulzura)… los dos nos equivocamos, pero eso ya no importa. Estamos juntos ahora.
Limpié de sus mejillas los rastros de lágrimas, acariciándolas. Me dediqué a observar sus delicadas facciones como si fuera la última vez, provocando que ______ me mirara inquieta y un poco avergonzada. Con parsimonia ubiqué una mano en su nuca y abrazándola por la espalda acerqué su cuerpo al mío. Ella respondió subiendo sus manos hasta mi cuello y cabeza, para acariciar mi cabello. Ese era un momento que ambos habíamos estado esperando, sin embargo no queríamos apurarlo. Necesitaba sentir cada segundo de aquello. Lentamente acerqué mis labios a los suyos, tocándolos apenas un poco, provocando. ______ siguió mi juego hasta que sentí que moriría si no la besaba de una vez.
Sujetando con fuerza el cuerpo de ______, la besé con ganas, como quería hacerlo desde hacía tiempo. Acaricié su cadera mientras ladeaba la cabeza para tener mayor acceso a su boca. Su lengua me provocaba, haciéndome sentir descargas de electricidad por todo el cuerpo. Nuestros pulsos se tornaron erráticos y nos costaba respirar, pero no nos separamos hasta que fue realmente necesario.
Nick: Te amo (sonreí feliz).
Tú: Te amo más (sonrió también, acariciando mi rostro). No más peleas, ¿está bien?
Nick: No te preocupes. No nos volveremos a separar.
Enterré mi rostro en su cabello, disfrutando de su aroma. Nos pertenecíamos el uno al otro. Nos amábamos y nada ni nadie nos volvería a separar.
Después de semanas perdido, por fin había vuelto a casa. Con ______ es dónde debía estar.

Capítulo 98 (Segunda Temporada)

jueves, 10 de enero de 2013

¡Chicas! No saben lo terrible que es tener claro en tu mente cómo quieras que sea un capítulo y no poder escribirlo :{/
Gracias por su paciencia y sus hermosos comentarios, de verdad que es por ustedes que hago esto ♥ ustedes me motivan a seguir escribiendo.
Que tengan un lindo fin de semana :{D

Fran.~

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Narras Tú:

El sol brillaba con fuerza sobre el cielo, provocando que las calles de Nueva York se llenaran de personas dispuestas a disfrutar de aquel maravilloso día, sin tomar en cuenta el sofocante calor que hacía.
Era nuestro segundo día en la Gran Manzana después de haber pasado unas espectaculares semanas de gira por Europa, durante las cuales también aprovechamos de vacacionar un poco. Como Fran tenía que arreglar su nuevo departamento en Nueva York, nos había invitado a Andre y a mí a quedarnos con ella y Joe por unos días. Ese había sido el plan hasta que el mismo día que volvíamos a Estados Unidos, Kevin llegó con un enorme ramo de rosas a nuestro hotel en París para hacerle una visita sorpresa a su prometida. Ambos se quedarían unos días más en la ciudad de las luces para luego embarcarse en un crucero por el Mediterráneo.
Fran no quería que volviera sola a casa y yo tampoco quería están sin compañía y tan cerca de Nick, por lo que acepté la invitación sin dudarlo. Además, amaba Nueva York. La ciudad era dueña de un espíritu que simplemente me robaba el corazón.
Tú: Tienes mucha suerte al poder vivir aquí (le comenté a mi amiga mientras comprábamos algunos muebles para el departamento).
Fran: Lo sé (sonrió), es una ciudad hermosa. Y sabes que prácticamente  la habitación de invitados tiene tu nombre, así que nos puedes visitar cuando quieras.
Tú: No me gusta interrumpir tu privacidad con Joe (hice una mueca).
Fran: Tú nunca interrumpes (me tomó del brazo para guiarme por la enorme tienda), no seas boba.
Después de mucho conversarlo y darle vueltas al asunto, Fran decidió vivir junto a Joe. Era algo que él siempre quiso y todos sabíamos que pasaría tarde o temprano. Además, era ridículo que vivieran en departamentos distintos siendo que pasarían la mayor parte del tiempo juntos.
Lo que la convenció del todo fue el fin de semana que pasaron en San Diego antes de que nosotras nos fuéramos de gira a Europa y los Jonas a Sudamérica, pues dieron un paso más en su relación e hicieron lo que cualquier pareja joven y enamorada haría, consumaron su amor.
Me encantaba ver a mis amigos tan felices, pero no podía evitar sentir un poco de celos. Mis mejores amigas estaban con los chicos de sus sueños mientras que yo me lamentaba internamente. Lo único que deseaba era sentir nuevamente la dicha de ser querida, de estar junto a alguien que me quisiera, y ese alguien tenía nombre y apellido.
Había pensado mucho en mi situación con Nick. Todavía me dolía su engaño, pero no había dejado de amarlo ni siquiera un día. Y lo necesitaba tanto que llegaba a lastimar. Necesitaba sentirlo cerca, disfrutar de su tacto, de su aroma, abrazarlo, besarlo, perderme en sus brazos y saber que todo estaría bien. Pero eso no pasaría. Todavía había algo que me retenía y no sabía qué.
Fran: Estás muy despistada últimamente (me miró preocupada). ¿Te sientes bien?
Tú: Sí (mentí. No quería seguir preocupando a mis amigas con mis tontos problemas). Todavía siento el jet lag, eso es todo. ¿Qué más falta comprar? (pregunté mientras salíamos de la tienda).
Fran: Mmm… faltan las mesitas de noche del cuarto de invitados, las alfombras, algunas cosas para los baños y la cocina (enumeraba mientras tachaba de su libreta lo que ya tenía). Joe dijo que se encargaría de ir a buscar los cuadros que encargamos y sus instrumentos musicales los llevarían al departamento, así que creo que eso es todo (levantó la mirada).
Tú: Todavía es temprano (miré mi reloj). ¿Qué tal si nos tomamos un helado camino a la próxima tienda? (propuse).
Fran: Me encantó tu idea (sonrió).
Estaba realmente cansada cuando llegamos al departamento después de un intenso día de compras. Si pensaba que comprar ropa y accesorios era complicado, decidirse entre cientos de distintas alfombras, cubiertos, vajilla, muebles, entre otros, era una tortura. Sin embargo disfrutaba pasar tiempo con mi amiga y presenciar lo feliz que la hacía ver cómo su hogar tomaba forma.
Decidí tomar un baño de burbujas para relajarme un poco y despejar mi mente. Tal como lo hacía cuando era niña, me quedé en la bañera hasta que mis manos y pies se arrugaron como si fuera una anciana. Me vestí con ropa cómoda y estaba por secar mi cabello cuando tocaron la puerta de la habitación. Me sorprendí al ver a Fran vestida con una falda plisada color blanco, blusa amarilla y chaqueta negra.
Tú: ¿Planes para esta noche? (curioseé al verla tan arreglada).
Fran: La verdad es que sí. Un amigo de Joe abre hoy su restaurante y después de cenar ahí iremos a celebrar a un club. ¿Quieres ir con nosotros? (preguntó animada).
Tú: La verdad es que estoy cansada, y no quiero entrometerme en su cita (torcí el gesto).
Fran: ______, te lo he dicho mil veces, ¡tú nunca sobras!
Tú: Pero hace semanas que no pasas tiempo a solas con tu novio (contraargumenté).
Fran: Amiga, no te quiero dejar sola (se acercó hasta sentarse a mi lado en la cama).
Tú: No te preocupes (sonreí sincera), voy a estar perfectamente bien. Pediré comida tailandesa, veré una película y tú tendrás una perfecta velada con Joe.
Fran: ¿Estás segura? (al parecer no estaba muy convencida).
Tú: Segurísima (la tomé de las manos y la arrastré afuera de mi habitación). Diviértete, ¿sí?
Realmente no tenía ganas de salir, por lo que una noche en casa era todo lo que podía pedir. Y se podía ver por la cara de Joe que quería estar a solas con Fran, aunque ninguno de los dos lo reconociera para no herir mis sentimientos.
Cuando la pareja se fue pedí la cena y me acomodé en el sillón de la sala de estar para buscar alguna película en la televisión. No mucho después el timbre sonó, lo que me pareció extraño. No habían pasado ni diez minutos desde que había hecho mi pedido y habían dicho que tardarían treinta.
Al abrir la puerta me impresioné tanto que se me olvidó dónde estaba, quién era o cómo respirar. Las lágrimas enseguida se apoderaron de mis ojos y mi corazón comenzó a latir tan fuerte que pensé se me saldría por el pecho en cualquier comento. No sabía si era un sueño o una pesadilla. Nick estaba al frente mío, mirándome tan profundamente que mis rodillas flaquearon.
Nick: Tenemos que hablar.

Capítulo 97 (Segunda Temporada)

domingo, 30 de diciembre de 2012

¡Chicas! Lo siento por demorarme en subir, he tenido cero tiempo para escribir. Aquí va mi regalo de Navidad atrasado jajajaj
He estado muy ocupada porque estoy trabajando en una boutique todo el día y llego muuuy cansada. Por suerte mañana es mi último día y empiezo las vacaciones!!! Así que voy a tener más tiempo para escribir y por fin terminar la  nove!!!
Muchas gracias por su paciencia y comentarios ♥ un besote!!!

Fran.~

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Narra Nick:

Estaba realmente cansado cuando llegamos a casa después de semanas de estar en gira con mis hermanos por Sudamérica. Habían sido días agotadores, pero no me quejaba. El cariño que las fans nos daban era algo incomparable y las ciudades eran maravillosas. Sin embargo, no había podido disfrutar de la gira como otras veces.
Al principio había pensado que estar a miles de kilómetros de Los Ángeles y de ______ me serviría para dejar de pensar en ella, pero estaba equivocado. No pasaba un momento sin que me arrepintiera del daño que le había hecho y que sabía habría podido evitar.
Le había ocultado que Andrés había vuelto sólo porque no quería que ______ siguiera saliendo lastimada por culpa de ese psicópata, sin embargo el plan no había resultado. Y no solamente le había roto el corazón a ella, sino que a mí también. No podía sentirme más arrepentido.
Cerré la puerta de mi habitación, me quité la chaqueta, zapatos y pantalones y me metí en la cama. Necesitaba un poco de calma, tenía que pensar.
Durante las últimas semanas había intentando huir del recuerdo de ______, de la ferviente necesidad que tenía de tenerla a mi lado, de rogarle que olvidara todo y me diera otra oportunidad. La amaba,  sabía que no podía vivir sin ella y si sus sentimientos no habían cambiado, ella correspondía los míos. Lamentablemente, a esta altura no podía asegurar eso. No hablada con ella desde aquella última vez en el hotel, cuando me vio besando a Cata y el complot que hasta ese momento teníamos para desenmascarar a Andrés se fue al bote de la basura, junto a mi relación con ______. En aquel pasillo me dijo que me amaba, pero que no podía estar conmigo.
«También te amo, Nick. Te amo. Eres mi primer amor y quiero más que nada que seas mi último, pero no puedo seguir con esto. Al menos, no ahora. Hemos terminado». Esas palabras me habían atormentado noches enteras, sin estar seguro qué podía esperar de ellas. ¿Volveríamos a estar juntos, o nunca me perdonaría haberle mentido y engañado?
______ estaba muy herida, lo sabía. Andre, Fran y mis hermanos no impidieron que me enterara del difícil período por el que pasó después de nuestra ruptura, lo que hizo que mi culpa aumentara. Llegué a odiarme por todo el daño que le había provocado a la persona que más amaba en el mundo, y todavía lo hacía un poco. Me lo merecía, sin embargo, y también merecía que ______ me odiara.
Me tranquilizó un poco saber que cuando se fue a Europa con las chicas, ______ estaba mucho mejor. El trabajo y a la vez tener tiempo libre con sus amigas le haría bien, la haría despejarse y aclarar sus ideas, pero fueron incontables las veces que tomé mi celular y estuve a un click de llamarla. No debía hacerlo, lo sabía, pero extrañaba mucho su voz, más de lo que pensé que haría. La necesitaba tanto.
Ignoré los golpes de mi madre en la puerta, avisándome que la cena estaba lista. No tenía apetito. A decir verdad, hacía semanas que me costaba comer y dormir, pero me obligaba a hacerlo. Estando de gira no me podía dar el lujo de enfermarme ni tener mala cara. Tampoco quería dar pena, pues sabía que era “el malo de la película” en esta historia, aun cuando mis amigos y hermanos nunca dejaron de apoyarme y darme esperanza, diciendo que pronto ______ volvería conmigo.
Cansado de pensar y no obtener respuestas, me dirigí al teclado que tenía en uno de los costados de mi habitación. Comencé a tocar una melodía que había estado rondando mi cabeza por días. Varias canciones fueron resultado de mis noches en vela en distintos hoteles del mundo, lo que ponía mi mente en orden. La música era una de las pocas cosas que me estaba manteniendo cuerdo.
Poco a poco las palabras comenzaban a fluir en mi mente. Necesitaba vaciar mi cabeza, sacar mis pensamientos antes de que explotara.

«There's a storm coming up
and I gotta prepare myself.
'Cause this feeling's
getting stronger everyday.

Something's creeping inside
everything is about to change.
Gotta face the fact
that I can't walk away.

This is critical,
I'm feeling helpless.
So hysterical, this can't be healthy.
I can't eat or sleep
when you're not with me.
Baby, you're the air breath.
This is critical, yeah.
So stuck on you.

Used to have everything figured out
but it's different now.
When you came, you saw
you conquered my heart.

It's your laugh and your smile;
wanna stay for a little while.
I don't wanna go,
I just want you in my arms.

This is critical,
I'm feeling helpless.
So hysterical, this can't be healthy.
I can't eat or sleep
when you're not with me.
Baby, you're the air breath.
This is critical, yeah.
So stuck on you.

Used to run and hide.
Used to bend our love.
But I can't escape this time.
Oh no.

This is critical,
I'm feeling helpless.
So hysterical, this can't be healthy.
I can't eat or sleep
when you're not with me.
You're the air breath.
This is critical, yeah.»

Estuve más de tres horas en el teclado sin darme cuenta, tiempo que me sirvió para reflexionar mucho y tomar una decisión. Ya le había dado tiempo suficiente a ______, en mi opinión. La necesitaba, debía escuchar su voz o de lo contrario moriría. Y sabía que ella también me necesitaba, así que la haría darse cuenta de aquello. No la iba a recuperar escribiendo canciones tristes encerrado en mi habitación. Tenía que luchar por ella, dar todo antes de rendirme.
Decidido, salí apresurado de mi habitación en busca de mis hermanos para contarles. Los encontré jugando pool en la sala de juegos.
Joe: La princesa por fin decidió salir de su habitación (se burló al verme).
Kevin: Mamá estaba preocupada por ti (informó con mirada reprobadora).
Nick: No me sentía bien (me excusé, rascándome el cuello). En fin, tengo que hablar con ustedes. ¿Cuándo llegan las chicas de Europa?
Joe: En un par de días más, pero Fran se queda en Nueva York porque prepararemos el departamento y según lo que me dijo, invitó a ______ para que no volviera sola a casa.
Kevin: Ya Andre se quedará en Francia porque le haré una visita sorpresa y pasaremos unos días en Europa de vacaciones.
Nick: ¿Por qué yo no sabía nada de esto? (pregunté ofendido).
Joe: Porque desde que terminaste con ______ casi no nos diriges la palabra, por más que intentemos hablar contigo (respondió a la defensiva, pero tenía razón).
Nick: Lo siento (dije con sinceridad). No he sido yo mismo las últimas semanas y fui injusto con ustedes.
Kevin: No te preocupes, hermano (puso una mano en mi hombro). Sabemos que has pasado por momentos duros y estábamos preocupados por ti, eso es todo.
Joe: De todas formas, ¿por qué querías saber cuándo llegan las chicas?
Nick: Recuperaré a ______, cueste lo que cueste (les informé con una sonrisa en la cara).
Joe: ¡Ya era hora! ¡Ese es el Nick que conocemos! (pasó un brazo por mi cuello y sacudió mi cabello).
Kevin: Creímos que nunca te decidirías. Felicidades (me abrazó). ¿Cuál es el plan?
Nick: Todavía no estoy muy seguro, pero creo que Nueva York es esta época del año es un buen lugar para una reconciliación, ¿no creen?

Capítulo 96 (Segunda Temporada)

domingo, 16 de diciembre de 2012

Narras Tú:

Europa me dejaba simplemente sin aliento. Cada país, cada ciudad, cada rincón era completamente maravilloso y no pasaba un minuto sin que me sorprendiera por aquellos hermosos lugares.
A pesar de que con Andre y Fran estábamos trabajando la mayor parte del tiempo, ya fuera en firmas de autógrafos y discos, apariciones en televisión y radio, conferencias de prensa, entrevistas o haciendo conciertos, habíamos tenido la oportunidad de turistear un poco y salir de compras entre actividades. Visitamos las principales ciudades de cada país y sus lugares más famosos, como palacios, museos, ríos, catedrales, avenidas, parques y grandes estructuras arquitectónicas
Reino Unido, Irlanda, España, Alemania, Italia, Dinamarca, Grecia, Suiza y Francia habían sido los países que nos habían acogido durante el último mes, pero de todos, este último se había robado mi corazón.
Ya casi terminando la gira por el viejo continente, pasamos un par de días libres disfrutando de las paradisiacas playas de Mónaco. Al fin y al cabo era el verano europeo y no lo podíamos desperdiciar. Nuestra última parada era París, la ciudad del amor. Era imposible no sentirse inmediatamente inspirada por el aire que se respiraba ahí. Las luces, la música, la arquitectura, la gente, todo era como un sueño.
Después de estar todo el día recorriendo las calles de París, visitando el Arco del Triunfo, la Catedral gótica de Nôtre-Damme, el Museo de Orsay y entrando a cada tienda a la que Fran nos obligaba, decidimos cenar en un restaurante que estaba a sólo un par de cuadras de la Torre Eiffel.
Fran: Siento que mis pies van a explotar (se quejó cuando nos sentamos en una de las mesa de la terraza, tal como nos había indicado el maître). Aunque valió la pena. ¡París es una ciudad maravillosa!
Tú: ¿Verdad? Creo que estoy enamorada (suspiré mirando el cielo que comenzaba a estrellarse).
Andre: Prefiero España (admitió), pero para ser justa, todos los países a los que hemos ido han sido espectaculares. Este ha sido uno de los mejores meses de mi vida (sonrió contenta).
Fran: Sí, y es un poco triste pensar que en un par de días volveremos a casa (torció el gesto). Lo único que me anima es saber que Joe me estará esperando en Nueva York. Queremos dejar todo listo en los departamentos antes de irnos de vacaciones. ¿Tus papás han organizado algo, Andre?
Andre: Hasta ahora nada, pero con ______ queríamos ir a San Francisco a visitar a Nacho. Hace meses que no lo vemos.
Tú: Y por más desconsiderado que sea con nosotras porque está pegado en el trabajo, lo iremos a ver.
Fran: Es increíble cómo tantas cosas han cambiado durante un año (reflexionó después de unos minutos de silencio). Perdiste la memoria (me indicó), conocimos a los Jonas, nos hicimos cantantes, nos enamoramos, te comprometiste (miró a Andre), con Andre entramos a la Universidad, me iré a vivir a Nueva York. Muchas cosas nos han pasado y varias han sido gracias a que Nick encontró a ______ sola y sin memoria en las calles de Los Ángeles y la ayudó.
Sabía que Fran no había nombrado a Nick con el afán de hacerme sentir incómoda, pero no pude evitar bajar la mirada, apenada. Por más que ya no estuviera como alma en pena por mi rompimiento con él, lo extrañaba mucho, no podía negarlo.
Andre: Hablando de Nick (empezó mi amiga, mirándome significativamente). Supongo que no has hablado con él…
Tú: No, y tampoco pretendo hacerlo (respondí tajante).
Andre: Por favor, ______, no seas ridícula. Apuesto que te mueres por saber qué ha estado haciendo, con quién ha estado saliendo…
Tú: ¿Está saliendo con alguien? (pregunté alarmada. No podía creer que los celos se apoderaran de mí tan fácilmente).
Fran: Claro que no, tonta (puso los ojos en blanco). Andre sólo decía eso para probarte. ______, sabes que Nick se muere por ti. Lo único que quiere es que vuelvan a estar juntos. ¿Por qué no le das otra oportunidad?
Eso mismo me había estado preguntando todos los días durante el último mes. ¿Por qué no simplemente olvidaba todo lo que había pasado y volvíamos a estar juntos? Tenía que aceptar que incontables veces había tomado mi celular con la segura intención de llamarlo o enviarle un mensaje de texto, pero mi orgullo siempre había ganado. No podía hacerlo, simplemente no podía. Había algo que todavía no había sanado, algo que necesitaba superar antes de hablar con él.
Me había roto el corazón como nunca pensé que alguien lo haría, pero supongo que nunca se está preparado para darte cuenta que la persona que amas te mintió de la manera en que Nick lo hizo conmigo.
Sin embargo, seguía con la esperanza que quizás él daría el primer paso. Sabía que era ilusionarme, porque conociéndolo tan bien como lo hacía, esperaría a que yo actuara primero. No porque Nick fuera orgulloso, sino porque me estaba dando mí espacio. Él sabía que tarde o temprano volvería a sus brazos, pero tenía que ser yo la que decidiera cuándo sería eso. Y me aterraba pensar que Nick no estaría dispuesto a esperarme por mucho tiempo.
Tú: Sé que él es su amigo y que esto es complicado para ustedes también porque están en el medio, pero para mí no es tan fácil como parece (susurré después de pensar bien qué decir). Tú misma lo sabes, Fran. Aunque ames a una persona, hay otros factores en la relación que no permiten que siga como tú quieres. Nick me mintió en algo que es muy delicado para mí y es algo difícil de olvidar. Andrés me hizo mucho daño, y que Nick me ocultara que él había vuelto todavía me duele (mi voz se quebró, mas me esforcé por no dejar que las lágrimas cayeran). Me subestimó, prefirió ayudar a Cata que decirme todo lo que estaba ocurriendo, no confió en mí.
Andre: Lo que menos quería era hacerte daño.
Tú: Lo sé (hipé), pero hay veces en las que las intenciones no son lo que valen.
Fran: ______, de verdad lo sentimos (sobó mi espalda con cariño). No queríamos arruinar nuestros últimos días en Europa, pero tampoco nos gusta ver a nuestra amiga triste. Estamos preocupadas por ti.
Andre: No podemos quejarnos, en Los Ángeles parecías un fantasma (rió para aligerar el ambiente). ______, sólo queremos volver a verte feliz, y prometemos no volver a hablar de Nick. ¿Verdad, Fran? (miró a la aludida seriamente).
Fran: Así será (aseguró), aunque tengo una última cosa que decir. No dejes que tu orgullo le gane a tu corazón. Tómate el tiempo necesario para curar tus heridas, pero cuando ya estés bien, hazle caso a tus sentimientos y no a tu cabeza. De lo contrario, puede ser muy tarde.
A mi pesar, sabía que mi amiga tenía razón.

Capítulo 95 (Segunda Temporada)

lunes, 26 de noviembre de 2012

¡Chicas! Mucho tiempo sin subir, no saben lo mal que me siento :( soy un asco, de verdad, pero el lunes que viene doy la PSU nuevamente, que es la prueba que se da en Chile para entrar a la Universidad, así que entre el estudio, trabajo y otras actividades he tenido muy poco tiempo.
No sé qué he hecho para merecer lectoras tan fieles y maravillosas como ustedes, que me esperan ♥ no las merezco. Aunque sean pocas SIEMPRE están conmigo y no saben cuánto se los agradezco.
Espero la próxima semana ya tener más tiempo y subirles más seguido, ya que queda poco para que se termine el año y la novela :O sigo con la idea de llegar a los 100 capítulos, así que de aquí a fin de año va a terminar la nove. Espero que me sigan con los otros proyectos que tengo en mente. Ya las informaré al respecto.
Me apuro porque tengo que ir a trabajar. Un beso enorme, las adoro 


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Narras Tú:

Suspiré resignada al ver el montón de cosas que tenía que llevar para el viaje a Europa. Estaría un mes allá, por lo que era comprensible llenar varias y enormes maletas, pero eso no quitaba que fuera una real molestia tener que empacar.
Puse música en el reproductor y comencé con la ardua tarea. Estuve tentada de simplemente tomar todo lo que estaba en mi armario y guardarlo en la maleta, como estaba segura que Fran haría, sin embargo sabía que después me arrepentiría. A medida que hacía una lista mental de lo que creía necesitaría, buscaba las cosas y las guardaba.
Tú: Mi vestido morado… ¿dónde está?
Me pregunté en voz alta al no encontrarlo en mi armario. Intenté hacer memoria, pero sabía que lo había dejado ahí. Quizás alguna de las chicas lo había sacado, por lo que me dirigí a la habitación de Andre para preguntarle si lo había visto.
Como era costumbre, entré sin tocar la puerta, y enseguida me arrepentí de aquello. Mi amiga estaba entre el colchón de su cama y el cuerpo de Kevin, besándose como si no hubiera mañana.
Tú: Lo siento chicos (me disculpé sin evitar reír al ver sus expresiones). Hola, Kevin. No sabía que estabas aquí.
Kevin: Hola, ______ (sonrió de medio lado, sonrojado).
Andre: Llegó hace poco (dijo mientras se arreglaba la ropa y el cabello).
Tú: Ya veo (reprimí una carcajada. Se veían tan avergonzados que era adorable). Sólo te quería preguntar si habías visto uno de mis vestidos, pero no te quiero molestar.
Andre: No te he sacado ninguno. Revisa en la habitación de Fran, lo más probable es que esté allí.
Tú: OK. Ustedes sigan en lo suyo (me despedí de ellos con expresión pícara).
Cerré la puerta detrás de mí y dejé que mis amigos siguieran en lo suyo. Los chicos se irían de gira por Latinoamérica y nosotras estaríamos en Europa por las próximas semanas, por lo que Andre y Kevin estarían bastante tiempo sin verse. Tenían derecho a disfrutar de la compañía del otro antes de irse.
Fran y Joe estaban en un plan parecido, ya que habían decidido darse unas pequeñas vacaciones en las playas de San Diego por el fin de semana.
No podía evitar sentir un poco de envidia al ver a mis amigas con sus novios. Me hacía extrañar más de lo que pensaba a Nick.
Ya habían pasado cerca de diez días desde que había terminado con Nick, pero parecía mucho más tiempo. No pasaba un solo día sin que lo recordara, sin que quisiera con desesperación tomar mi teléfono y llamarlo. Necesitaba tenerlo cerca, abrazarlo, besarlo, pero no podía.
Por más que pretendiera frente a mis amigos que estaba bien, todavía no había perdonado a Nick por mentirme, no realmente. Ya había dejado de lado la etapa patético-depresiva en la que me sumí los primeros días, pero seguía sintiendo un agudo vacío en el centro de mi corazón, acompañado de una incómoda sensación de ardor en el borde. No me importaba, sabía que terminaría acostumbrándome al dolor.
Me pregunté cómo lo estaría llevando Nick. Hasta ahora no había tenido el coraje de preguntarle a mis amigas o sus hermanos cómo estaba, y ellos tenían la suficiente delicadeza como para no sacar a la luz el tema. Se los agradecía tácitamente, sin embargo tenía ganas de saberlo. Por lo que había escuchado en los pasillos de la discográfica, había pasado mucho tiempo encerrado en el estudio, lo que sólo podía significar que estaba canalizando sus sentimientos a través de la música, algo muy propio de él. Quizás tampoco lo estaba pasando muy bien.
Después de volver del cuarto de huéspedes, donde encontré el vestido que buscada, a mi habitación, seguí ordenando y empacando mis cosas hasta que fue hora de cenar. Tenía ganas de comer pastas, por lo que se me ocurrió invitar a Andre y a Kevin a comer a algún restaurant, pero los busqué por toda la casa y no los encontré. Me detuve al ver una nota pegada en la puerta de entrada que decía: «______, ve a tu habitación y ponte tu vestido de graduación. Allí encontrarás la próxima pista. Andre y Fran». Reía ante la ocurrencia de mis amigas, mas hice lo que me pedía. Saqué de mi armario el hermoso vestido estilo sirena color naranjo claro con encaje negro que hasta ahora no había tenido la oportunidad de usar. Había estado demasiado afectada por mi rompimiento con Nick que no tuve ganas de ir a mi fiesta de graduación, y para darme apoyo moral mis amigas tampoco fueron. Todavía me arrepentía por inconscientemente casi haberlas obligado a eso.
Cuando ya estuve lista vi pegado en el espejo de mi tocador otra notita. «Ahora tienes que prepararte para pasar la mejor noche de tu vida y bajar al sótano. Ahí te espera una sorpresa. Te queremos. Andre y Fran».
Intrigada, me dirigí directamente al sótano. Abrí la puerta con cuidado y enseguida el sonido de la música llegó a mis oídos. A medida que bajaba las escaleras una hermosa decoración quedó a la vista. La habitación estaba llena de globos y pequeñas luces tintineantes colgaban del techo. A uno de los costados una mesa con un largo mantel blanco estaba repleta de mi comida favorita.
Sonreí al ver todos los pequeños detalles en los que se habían empeñado mis amigas. En la pared había un enorme collage de fotos mi niñez junto a mis padres, de nuestras vacaciones en la nieve; también decoraban el cuarto imágenes de mí con mis mejores amigos, Fran, Andre y Nacho, durante todos nuestros años de amistad, y algunas más recientes con los Jonas. No pude evitar soltar unas lágrimas de felicidad. Era una bendición tener tan buenos amigos.
Fran: No se supone que tengas que llorar (me reprochó, apareciendo de la nada junto a Andre).
Tú: Esto es culpa de ustedes (me excusé secando mis mejillas). Esto es hermoso.
Andre: Nos perdimos nuestra fiesta de graduación, pero eso no quiere decir que no podamos celebrarla de todos modos (sonrió y me abrazó). Aunque cambiamos el gimnasio del colegio por el sótano y los cientos de invitados por sólo tres personas (torció el gesto al escuchar lo patético que se escuchaba, pero para mí era la mejor fiesta de todas). Y después de todo por lo que has pasado, te lo mereces.
Tú: Muchas gracias (nuevas lágrimas de emoción corrieron por mi rostro). Pero se supone que tú estarías con Joe en la playa (le dije a Fran), y tú con Kevin (miré a Andre). ¡No los verán por semanas!
Fran: Cambiamos nuestros planes para estar contigo, tontita. Las amigas son y serán más importantes que los chicos. Y tú has estado siempre con nosotras, esto es lo mínimo que podíamos hacer. Además, ya hacía hora que salieras de tu habitación y te divirtieras un poco.
Mis amigas tenían razón. Por más que siguiera doliendo, tenía que salir de mi miseria y disfrutar la vida. Al fin y al cabo no todo acababa después de una separación. Tenía puesto un hermoso vestido, estaba junto a mis mejores amigas, quienes también estaban vestidas para la ocasión, había comida, música y buen ambiente. Tenía derecho a pasarlo bien, me lo merecía. Dejaría guardado bien dentro de mi corazón todos los amargos sentimientos y me concentraría en lo positivo.
Tú: Chicas, prepárense para la mejor noche de sus vidas.
Sonreí dispuesta a bailar hasta que mis pies no aguantaran más y reír sin parar junto a mis amigas, igual que en los viejos tiempos.

Capítulo 94 (Segunda Temporada)

miércoles, 31 de octubre de 2012
Chicas, lo siento mucho por demorarme en subir. No saben lo que me costó escribir este capítulo. Tenía muchas ideas, algunas que contraponían con otras, etc, así que MAL. Pero gracias a Dios lo terminé. Espero que les guste. Quizás se lea un poco exagerado, pero de verdad ______ sufre por lo que hizo Nick.
Muchas gracias por sus comentarios, ideas, lindas palabras ♥ tengo MUCHAS ideas para nuevas novelas. Ya hice otra página y todo, que en un par de semanas les voy a dejar para que la tengan guardada, igual que un twitter y página de facebook. De verdad espero que me puedan seguir acompañando en este hermoso viaje que es la escritura, ya que sin ustedes soy nada.
Las adoro.

Fran.~
http://twitter.com/#!/fraani_/

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Narras Tú:

No estaba segura cómo había llegado a la playa de Santa Monica. Lo más probable es que hubiera tomado un taxi, pero todo era muy confuso como para afirmarlo. Tampoco me importaba mucho.
Inhalé el salado aire de la costa en un profundo suspiro, observando con mirada perdida como el sol comenzaba a esconderse bajo el mar. En cualquier momento anochecería.
Había perdido completamente la noción del tiempo. Podrían haber pasado horas desde que había llegado o sólo minutos. Eso tampoco me preocupaba. Lo único que quería en ese momento era estar sola.
Sentada sobre la arena, dejé que mis heridos sentimientos fluyeran a través de lágrimas tan saladas como el agua del mar. Sentía con fuerza el constante martilleo de mi cabeza y un punzante dolor en el pecho, que me impedía respirar normalmente. No podía pensar con claridad, todo dolía demasiado. Lo único que me quedaba era llorar. Llorar como si no hubiera mañana. Nada sacaba con intentar detenerme, las lágrimas salían por si solas. Sentía mi estómago vacío y un millón de pequeños pinchazos por todo mi corazón, una y otra vez, sin parar. Sollozaba sin que me interesara si alguien me veía. Necesitaba de alguna forma liberar el cúmulo de sentimientos que me hacía sentir como si fuera a explotar de un momento a otro.
El mensaje de texto, Nick besando a Cata, él diciéndome que Andrés estaba detrás de todo esto. Nada tenía sentido. Mi cabeza daba vueltas, mezclando recuerdos.
Nunca pensé que volvería a sentir tanto dolor. La última vez que me había sentido tan mal fue cuando mis padres fallecieron, sin embargo, esta vez era distinto. Tenía dolor, sí, mucho, pero también me sentía traicionada, engañada.
¿Por cuánto tiempo podía estar llorando desconsoladamente? Ni mil años parecían suficientes para disipar el dolor, la tortura que llegaba a ser física.
Cuando vi a Nick besando a Cata pensé que era una pesadilla o que me iba a desmayar. Fue como si hubieran enterrado un cuchillo en mi espalda, cuando estaba completamente indefensa. Jamás me imaginé que al ir al hotel me encontraría con eso. Esperaba un detalle romántico, quizás una cursi declaración de amor, pero no eso. Pensé lo peor de él, y lo odié, lo odié por amarlo tanto y que me engañara de esa forma.
Al enfrentarme a Nick intenté ser fuerte, no demostrar lo destrozada que estaba por dentro, aunque sé que no di mi mejor actuación. Él podía ver la congoja en mis ojos, y yo podía leer en su expresión lo arrepentido que estaba. Estaba al tanto del daño que me había causado, y lo sentía, pero eso no era suficiente. Por más que me hubiera explicado de la extorsión que Cata sufrió de parte de Andrés, de la inclusión de Nick y el plan que tenían para sacarlo de nuestras vidas para siempre, no podía soportarlo. No podía perdonarlo.
Si bien en teoría no me había engañado con Cata, sí me había mentido. Decidió lo que era mejor para mi vida y mi seguridad, me dejó de lado en algo que me implicaba y afectaba directamente. No fue honesto, traicionó mi confianza. Pensó que manteniéndome al margen todo saldría bien, y terminó siendo lo contrario. Él sabía que Andrés era un tema delicado, pero a la vez muy importante para mí.
Jamás debió ocultarme que él había vuelto, por más que la vida de otros estuviera en peligro. La policía se podría haber hecho cargo, pero no, Nick  “Superhéroe” Jonas tenía que salvar a todo el mundo, porque es lo que mejor sabe hacer.
También tenía que aceptar que aunque Nick no sentía nada más que amistad por Cata, el hecho de que la hubiera besado seguía sintiéndose amargo. Y después su «te amo». En ese punto ya no sabía si llorar, golpearlo o gritar. Estaba tan confundida. Nunca pensé que me pesaría tanto escuchar esas dulces palabras de los labios del chico que me amaba. No sabía si su declaración había sido para mejor o había empeorado las cosas. Quizás si yo no le hubiera dicho que también lo amaba las cosas estarían mejor. ¿Y por qué lo tuve que besar? No podía ser más idiota. No me arrepentía, pero sabía que había estado mal. Todo estaba tan mal.
Cerré los ojos deseando que todo terminara. Quería despertar y que nada de esto hubiera pasado. Quería desaparecer, y con ellos hacer que toda esta tristeza desapareciera.
Ya era tarde cuando decidí volver a casa. Las estrellas decoraban el negro cielo, avisándome que era de noche. Entré por la puerta principal sin prestarle atención a las expectantes miradas de mis amigas. Tampoco respondí cuando dijeron mi nombre una y otra vez. Estaba siendo injusta, pero no podía evitarlo. Necesitaba estar en la soledad de mi oscura habitación.
Cuando estuve nuevamente a solas las lágrimas reaparecieron. Había pasado horas llorando en la playa, ¿cómo es que todavía no me deshidrataba? ¿Por qué parecía como si no fueran a acabar nunca?
Tomé una calienten ducha y me metí en la cama con el cabello todavía húmedo. Silenciosas gotas cayeron por mis mejillas hasta que el cansancio finalmente ganó, haciéndome caer en un profundo sueño.

Los siguientes días no fueron muy distintos. Me la pasé acostada en mi cama, durmiendo o pretendiendo que lo hacía. Despertaba, me preguntaba si todo había terminado, si no había sido más que una pesadilla, si por fin podía abrir mis ojos. El constante dolor en mi corazón y las incontrolables lágrimas decían lo contrario, por lo que me volvía a dormía con las mejillas todavía húmedas por la tristeza. ¿Así se sentía realmente llorar? ¿Esto era tener el corazón roto?
Mis amigas al principio intentaron sacarme de mi miseria, pero se dieron cuenta que nada lograban. Se conformaron con comprobar que estaba comiendo y que todavía no perdía mi sanidad mental.
No supe exactamente cuántos días habían pasado cuando desperté sintiéndome un poco diferente. El dolor en el pecho había evolucionado a un vacío en el centro y una sensación de ardor en los bordes de mi corazón, lo que tomé como una buena señal, ya que no molestaba tanto como la punzada anterior. Mi mente estaba un poco más tranquila que de costumbre; seguía nublada por los dolorosos recuerdos de los últimos días, pero a la vez había un dejo de aceptación sobre ellos. Me acurruqué esperando que las lágrimas comenzaran a salir nuevamente de mis ojos, como había sucedido las últimas innumerables veces, sin embargo, nada pasó. Extrañada, salí de la cama y fui hasta mi baño para ver mi reflejo. Grandes ojeras se marcaban bajo mis ojos a pesar de haber dormido tanto. Pensé que tendría peor aspecto, para ser sincera. Me veía demacrada, pero mis ojos habían recuperado un poco de brillo. ¿Acaso por fin todo había acabado? Suspiré con un poco de esperanza.
Después de ducharme y sacarme el pijama por primera vez en días, tomé mi guitarra. A medida que acariciaba las cuerdas, tocando notas al aire, me di cuenta que por primera vez en días sentía un poco de calma. Luego de todo el sufrimiento y lamento, por fin comenzaba a avanzar. Mi relación con el hombre que amaba había terminado de una forma horrorosa, y eso nada lo podía cambiar, pero yo sí podía decidir cómo enfrentaría al mundo después de eso. Había vivido un duelo suficiente, era hora de seguir con mi vida. Sería difícil, lo sabía, pero tenía amigos que me ayudarían. Y siempre podía pretender. Era muy buena en eso. No solía demostrar mis sentimientos, por lo que aparentar que estaba bien frente a otros generalmente se me daba bien. Obviamente no le iba a hacer creer a la gente que no me importaba que Nick me hubiera mentido, pero sí podía hacer como si todo fuera civilizado. Tendría que pretender que estaba bien con todo lo que había pasado, que ya nada estaba mal.
De forma nata frases comenzaron a chocar en mi cabeza al compás de la melodía que estaba interpretando…

«If anyone asks
I'll tell them we both just moved on
When people all stare
I'll pretend that I don't hear them talk
Whenever I see you I'll swallow my pride and bite my tongue
Pretend I'm okay with it all
Act like there's nothing wrong

Is it over yet
Can I open my eyes
Is this as hard as it gets
Is this what it feels like to really cry
Cry

If anyone asks
I'll tell them we just grew apart
What do I care if they believe me or not
Whenever I feel your memory is breaking my heart
I'll pretend I'm okay with it all
Act like there's nothing wrong

Is it over yet
Can I open my eyes
Is this as hard as it gets
Is this what it feels like to really cry
Cry

I'm talking in circles
I'm lying, they know it
Why won't this just all go away

Is it over yet
Can I open my eyes
Is this as hard as it gets
Is this what it feels like to really cry
Cry».

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PD: La canción se llama "Cry" y es original de Kelly Clarkson, pero me inspiré en la versión de Glee https://www.youtube.com/watch?v=tATjClcmIoM