Capítulo 90 (Segunda Temporada)

lunes, 20 de agosto de 2012

Hola chicas :{) subo rápido porque ya es como tarde y mañana tengo clases.
MUCHAS GRACIAS POR LOS COMENTARIOS :{DDDD y no puedo creer que a esta altura tenga nuevas lectoras, wow, son lo máximo!!!
Las adoro 


______________________________________________________________________________

Narra Tú:

Al día siguiente del Baile de Primavera desperté desanimada. Al principio había sido una fantástica velada, pero en un momento Nick desapareció por unos minutos y cuando volvió se comportó muy extraño. No quiso hablar conmigo y estuvo sentado en la mesa por el resto de la velada. Yo aparenté no darle importancia y seguí bailando y divirtiéndome con mis amigos hasta que la fiesta terminó, sin embargo estaba realmente decepcionada. Tenía la esperanza de que Nick me dijera que me amaba, que quería estar conmigo para siempre, y no solo me quedé con las ganas, sino que también con un gusto amargo.
Intentando pasar de página me di una ducha reponedora y bajé con una gran sonrisa a la cocina, donde mis mejores amigas estaban desayunando.
Fran: Buenos días (respondió a mi saludo). Creímos que no ibas a despertar nunca. En menos de una hora es la reunión con Brad.
Tú: ¡Lo había olvidado! (exclamé culpable).
Andre: No te preocupes, dudo que se moleste si llegamos un poco tarde. Nos cita un día sábado en la mañana, mucho más no se puede pedir. ¿Saben de qué quiere hablar con nosotras? (preguntó intrigada).
Tú: Con él nunca se sabe, pero creo mucho que será algo sobre la gira (me senté para comenzar a comer)…
Fran: Ojalá sea eso, estoy muy emocionada por recorrer el país o sea el lugar al que nos envíen (sacudió sus manos inquieta). ¿Iremos a Europa? ¿O a Asia? (dudó).
Tú: Tranquila (reí). Es mejor esperar a que él nos diga antes de hacer suposiciones.
Fran: Quizás los chicos sepan algo (murmuró)… voy a llamar a Joe…
Andre: ¡Fran, cálmate por favor! (golpeó la mesa para parecer seria, mas estaba desternillándose).
Fran: Son unas aguafiestas (nos mostró la lengua descaradamente). Hablando de aguafiestas (se sentó derecha, adoptando una posición seria), ¿qué diablos le sucedió a Nick anoche? Intenté preguntarle y me dedicó una mirada escalofriante, sin exagerar.
Tú: No lo sé (comencé a jugar con mi servilleta). Todo estaba bien al principio y de la nada se comporta como un idiota (no quería sonar grosera, pero que mis amigas sacaran el tema hizo que mi molestia se reavivara). Intenté hablar con él y no tuve resultado alguno, así que preferí no contagiarme con su mal humor y dejarlo solo. En el camino de vuelta a casa no pronunció una sola palabra. Sinceramente no quiero hacerme mala sangre por sus tonterías (confesé suspirando), por lo que intentaré restarle importancia y esperaré a que ya se le haya pasado lo que fuera que le sucedió.
Después de desayunar llegamos más rápido de lo que pensamos a las oficinas de la discográfica, puesto que no había mucho tránsito. Como siempre, Brad nos esperaba en la espaciosa sala de reuniones con su preocupada, seria y habitual expresión.
Brad: Chicas, que bueno que llegaron. Tomen asiento, por favor (con un gesto con indicó las sillas desocupadas más cercanas a él). Primero que todo quisiera felicitar a Fran y a Andre por sus logros académicos y especialmente por tu compromiso (sonrió a la última). ______, no te preocupes (me miró comprensivo), porque tengo muchas cosas interesantes para que hagas mientras te tomas tu año sabático, aunque todo a su tiempo. Las cité hoy porque el verano se acerca y el trato fue que durante la época escolar se centraran en sus estudios, pero ya empezadas las vacaciones tenían que trabajar a tiempo completo. Sólo quedan unas semanas para que terminen las clases, por lo que ya tengo todo su itinerario desde Junio hasta Agosto.
Nos entregó una carpeta a cada una con un montón de documentos adentro. Con las chicas nos miramos confundidas y no esperamos más para ver cuáles eran los planes de Brad.
Fran: ¡NOS VAMOS A EUROPA! (gritó emocionada al ver el primer punto en nuestra agenda).
Brad: Sí (confirmó un poco aturdido por la espontaneidad de mi amiga). Como bien sale en los papeles que les acabo de pasar, estarán un mes completo en Europa de gira. Harán conciertos, entrevistas en televisión, radio y prensa, sesiones fotográficas, asistirán a eventos, en fin, todo lo que sea necesario para promocionar sus discos. También tengo planeado que comiencen a trabajar en su nuevo proyecto musical (nos mostró la segunda página de la carpeta). Sé que Andre y Fran van a estar ocupadas durante el año académico, por lo que entre más trabajemos en el verano mejor. Conseguí sesiones de composición, tanto de letras como de melodía, con renombrados músicos ingleses y franceses, por lo que quizás su estadía se pueda alargar, pero eso se verá cuando ya estén allá. ¿Alguna duda?
Con dificultad pude procesar todo lo que nuestro mánager nos estaba diciendo. ¿Viajar por Europa durante un mes entero? No podía caber en mí misma de la felicidad y agradecimiento. Me había esforzado durante todo el año para tener buenos resultados académicos, y aunque decidir no entrar a la universidad me había desalentado, la música me hacía sentir en una nube de felicidad, como siempre.
Andre: Es… genial. Simplemente genial (sonrió emocionada).
Brad: Se lo han ganado. Rindieron bien en el colegio, trabajaron todo lo que pudieron el verano pasado y ya es tiempo de volver a los escenarios.
Fran: ¡Eres el mejor! (todas corrimos a abrazarlo y llenarlo de besos en la mejilla, una cosa que sabíamos él odiaba).
Brad: Está bien, está bien (recibió nuestro cariño refunfuñando). Ahora váyanse porque tengo muchas cosas que hacer. Esta gira no se va a poner en marcha sola.
Nos despedimos con la mano y sin dejar de sonreír.
Fran: Ir juntas a Europa va a ser lo máximo (chilló camino al ascensor). Tengo que llamar a mis papás y a Joe (añadió alejándose un poco).
Andre: Creo que haré lo mismo. No quiero que los míos o mi prometido se enteren por otra parte.
Al ver que mis dos amigas llamaban a sus seres queridos, me obligué telefonear a mi novio. Después de varios pitos, contestó.
Tú: ¡Nick! Tengo una tremenda noticia (informé al escucharlo al otro lado de la línea). Recién terminamos una reunión con Brad y nos dijo que iríamos de gira a Europa en el verano, ¿no es genial? (exclamé agitada).
Nick: Sí, cariño, lo es (respondió igual de emocionado). Estoy muy feliz por ustedes, se lo merecen.
Tú: Estaba pensando que podríamos almorzar juntos para celebrar, ¿qué te parece?
Nick: Eh… no creo que pueda. Tengo un almuerzo de negocios, ya sabes, con esas viejas y aburridas personas, y no creo que me desocupe temprano (se excusó sonando extraño, casi nervioso).
Tú: ¿Estás bien? (inquirí).
Nick: Sí-sí (tartamudeó, algo muy extraño en él). Me tengo que ir, estoy atrasado. Te llamo después, linda, adiós.
Y sin esperar a que le respondiera, cortó la comunicación. Fruncí el ceño y me quedé mirando el celular, como si el aparato me fuera a dar una explicación.
Unos pocos segundos después comenzó a vibrar, avisando que un número desconocido me había enviado un mensaje. Al abrirlo unas fotos que mostraban a Nick entrando a un restaurante y sentándose junto a Cata ocuparon la pantalla.
Sentí como mi estómago se hacía un nudo y el calor de la rabia comenzaba a recorrerme. Si Nicholas no quería decirme que le había sucedido la noche anterior, bien, estaba en todo su derecho, pero algo que jamás soportaría eran las mentiras, y él me acababa de engañar sin reparo alguno.