Capítulo 24 (Segunda Temporada)

martes, 2 de junio de 2009
Narra Andre:

Ése día me levanté bastante temprano. Me duché, vestí y cuando salí a desayunar no creí que tendría compañía, pero al parecer Joe tampoco tenía sueño.
Andre: Buen día.
Joe: Hola. ¿Quieres jugo? (ofreció).
Andre: Esta bien. ¿Te caíste de la cama? Porque no acostumbras levantarte a esta hora.
Joe: Jajaja. No, no me caí de la cama. Sólo no podía dormir.
Andre: ¿Algo en especial que te lo impida?
Joe: No es algo malo, todo lo contrario. Simplemente… amo a mi novia (sonrió ampliamente). Ayer hablamos de eso con Fran. Me dijo que me amaba y me di cuenta que yo también estaba enamorado de ella.
Andre: Wow… ¡es genial! Estoy muy feliz por ustedes (lo abracé).
Mientras felicitaba a Joe alguien carraspeó a mi espalda. Volteé y vi a mi novio con expresión celosa.
Kevin: Creo que es mejor que me vaya, estoy sobrando.
Andre: No te vayas. Lo que pasa es que ayer Fran y Joe se dijeron que se amaban. ¿No es lindo?
Kevin: ¿Así que se reconciliaron? ¡Que bien! Estoy orgulloso por ustedes, hermano.
Joe: Muchas gracias a los dos. Ahora me voy al gimnasio. ¿Alguien me acompaña?
Kevin: Yo paso.
Andre: Quizás otro día.
Joe: OK. Si Fran despierta díganle que me busque.
Joseph se fue y Kevin preparó el desayuno. Era muy extraño el hotel porque como éramos mucha gente teníamos todo un piso, que estaba acondicionado para que pareciera una casa. Tenía cocina y salas de juego sólo para nosotros, aparte de las que había para todos los que se hospedaban en el hotel.
Andre: Que romántico. Es demasiado tierno que tú novio te diga que te ama.
Kevin: Eh… ¿es una indirecta? (preguntó preocupado).
Andre: ¡No! ¡Claro que no! Sólo creo que es dulce, pero estoy preparada para decirlo. ¿Tú sí? (me alarmé).
Kevin: Creo que no. No es que no te quiera, pero… es un gran paso. Y porque ellos se lo digan no quiere decir que nosotros también debemos hacerlo. Digámoslo cuando lo sintamos.
Andre: Tienes razón. Te quiero mucho.
Kevin: Yo también te quiero mucho, pequeña.

Narras Tú:

Estaba sola en la cocina poniendo los platos en la mesa para que cenáramos cuando unas manos se apoyaron en mis caderas y alguien depositó un beso en mi mejilla.
Tú: Nick, me asustaste (dije sobresaltada).
Nick: Lo lamento. No era esa mi intención.
Sus brazos me rodearon y comenzó a besar mi cuello suavemente.
Tú: No puedo terminar de ordenar la mesa si haces eso.
Nick: Entonces no termines de colocar los platos (sonrió contra mi piel).
Me volteó con un fluido movimiento y su boca se apoderó de mis labios, pero corrí la cara y me alejé de él.
Tú: Le dije a Denise que lo iba a hacer (respondía seria).
Nick: ¡¿Qué te pasa ______?! (preguntó molesto).
Tú: Nada, sólo quiero terminar esto para que podamos comer.
Nick: ¿Y por eso no dejas que te bese?
Tú: Tus hermanos tienen hambre y hay muchas cosas por hacer, no podemos perder tiempo.
Nick: ¿Así que si estás conmigo pierdes el tiempo?
Tú: No, pero no quiero que después nos regañen…
Nick: ¡Por favor! Deja de usar a los demás como excusa y dime la verdad.
Tú: ¿Y cuál es según tú la verdad?
Nick: Que ya no quieres estar conmigo.
Tú: Las cosas que dices Nick, es ridículo (di la vuelta pero él me sujetó el brazo obligándome a mirarlo).
Nick: ¿Entonces qué es lo que te pasa?
Tú: Nada.
Nick: ¡¿Por qué no puedes confiar en mi ______?! ¿Cómo quieres que te entienda si nunca me dices lo que sientes o piensas? Además ni siquiera has sido lo suficientemente valiente para decirme en que estamos, porque sinceramente esto no parece un noviazgo.
Tú: ¡Claro, ahora todo es mi culpa! Yo soy la que no confía y que está confundida. Por si no lo sabías, Nicholas, las relaciones son de dos personas (reclamé enfadada).
Nick: Pero el problema es que tú no cooperas. Yo siempre soy el que tiene que ceder, el que pide perdón y el que te busca. Estoy harto de esto.
Tú: Bien, entonces dejémoslo hasta aquí.
Nick: Es una perfecta idea, adiós.
Nick se fue a su habitación dando grandes zancadas y con la cara roja de furia.

Narra Nick:

Después de la comida fui al cuarto de ______. Me sentía terrible. Verla en la cena intentando hacer como si nada estuviera pasando para no tensar el ambiente. ¡Ni siquiera me miró! Pero yo en cambio no dejaba de fijarme en sus acciones. No debí hablarle así, me dejé llevar por el momento…
Toqué la puerta y cuando ______ abrió me miró sin ninguna expresión en el rostro. No pude descubrir nada en sus ojos y eso me puso aún más nervioso de lo que estaba.
Nick: ¿Puedo pasar? (pregunté despacio. Ella se hizo a un lado como respuesta). Necesitamos hablar, ______ (dije una vez adentro).
Tú: Pensé que ya lo habías dicho todo.
Nick: ¡No! Mira, yo no quise decir esas cosas…
Tú: Uno no dice las cosas que no quiere decir, Nick.
Nick: ¿A qué te refieres? ¿Tú no te arrepientes de lo que dijiste? (ella bajó la mirada). ¡Mírame, ______!
Luego de un suspiró volví a encontrarme con sus ojos. Me preocupé. Sentí un miedo en mi interior muy extraño. No quería que esto pasara…
Tú: Nick… yo… realmente creo que es lo mejor…
Nick: ¿Qué es lo mejor?
Tú: Sé que no fue la mejor manera de decirlo… (miró a la ventana que tenía a su lado apretando los labios. Sabía que estaba conteniéndose). Pero creo que ya no debemos estar juntos…
Nick: ¡¿Por qué?! ¿Qué pasa? ¿Ya no me quieres?
Tú: No, no. No es eso Nick. Yo te quiero (respondió mirándome fijamente a los ojos).
No entendía, absolutamente nada de lo que pasaba. Cuando vi sus ojos, ahora vidriosos, me quedé sin palabras. Conocía a ______ y sabía que no diría estas cosas sin estar segura, y eso precisamente era lo que más me dolía.
Nick: Entonces explícame, porque no estoy comprendiendo.
Tú: Es lo mejor para los dos…
Nick: ¡¿Cómo puedes decir eso?! ¡Tú no sabes...!
Tú: ¡No, no sé! No sé qué es lo mejor, pero intento hacerlo, Nick. ¡Míranos, no podemos estar un momento sin discutir! Yo te quiero, y mucho, pero eso no es suficiente. Esto nos hace mal a los dos, o por lo menos a mí, y no podemos seguir así. No quiero seguir así…
Nick: Podemos intentar, ______. Yo puedo poner más de mi parte.
Tú: No, Nick, no podemos mantener esta relación así. Un tiempo solos nos haría bien para pensar…
No sabía que decir. Me sentía tan mal… y no quería perderla. Aunque peleáramos o discutiéramos todo el día (aunque no era así) no me importaba, porque habían muchas cosas buenas en ella que no cambiaría. Pero tampoco te puede forzar a estar en una relación…
Nick: ¿Estás segura de esto? (me di cuenta que una lágrima caía por su mejilla mientras asentía con la cabeza). Entonces supongo que no hay nada más sobre que hablar… (______ mantuvo la mirada baja mientras caminaba lentamente hacia la puerta). Nos vemos mañana… (dije sin mirarla).
Cerré la puerta y caminé hasta mi habitación con las manos en los bolsillos y la vista en el suelo. Llegué a buscar un lápiz y una hoja para ver si salía algo bueno de todo esto.